¿Sabéis que un mismo vino puede ser diferente dependiendo de su añada? La añadas de los vinos varían, ya que existen muchos factores que afectan a la calidad de la cosecha.


¿Pero qué determina la calidad de una cosecha?

Principalmente las condiciones metereológicas a las que han estado sometidos los viñedos durante ese año. Estos cambios hacen que la vendimia se adelante o se atrase. También afecta al desarrollo de la uva, en la aparición de plagas y la necesidad de aplicar tratamientos a la viña. Además también determinan la cantidad de producción de ese año.

En Francia, Alemania, la mayor parte de Italia y España, por ejemplo, problemas como las heladas, el granizo, las lluvias o el calor a destiempo pueden afectar negativamente a las cosechas.
Estos son los agentes climáticos adversos al cultivo de la vid:

  • La sequía:  Es uno de los principales problemas en las cosechas de uva, ya que se puede perder un gran porcentaje de uva, a veces más del 50%.
  • Las Heladas:  Si la temperatura desciende más de los -6º, la viña puede verse seriamente afectada.
  • El Granizo:  Los daños producidos por el granizo son la rotura de pámpanas, sarmientos o racimos, dependiendo de la fecha en la que se produzca. Este es uno de los peores fenómenos metereológicos a los que se puede enfrentar la vid.
  • El Viento:  La acción del viento produce la diseminación de enfermedades y plagas, también como la rotura de ramas y el despegado de los sarmientos en la base.

Uno de los aspectos más importantes para conseguir una buena calidad del vino es elegir el momento adecuado de la cosecha.
Si se recoge la uva demasiado pronto, está verde y por tanto el vino es ácido con notas herbáceas y falto de aroma. En este caso, el vino tiene poco color y es muy astringente. Por el contrario, al recoger la uva demasiado madura, se obtienen vinos faltos de acidez, fáciles de oxidar y con ausencia de aroma.

Es fundamental determinar el momento idóneo para la cosecha de la uva. Actualmente con la ayuda de la tecnología, podemos medir los ácidos y los azúcares de la pulpa que, aunque no tienen en cuenta el estado de la madurez de la piel y la semilla, nos ayudan a elegir el momento correcto de la vendimia.

Los muestreos son análisis sobre las bayas, días previos a la vendimia con el fin de determinar la madurez de las uvas.
Como habéis podido leer, son muchos los factores incontrolables entran en juego a la hora de determinar la calidad de las añadas de los vinos, pero con un gran equipo como nuestro, siempre saca lo mejor de nuestra excelente materia prima.

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